Popular Posts

Menú

Mostrando entradas con la etiqueta Fotografía. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Fotografía. Mostrar todas las entradas

jueves, 2 de noviembre de 2023

Knolling otoñal

Un knolling es una tendencia fotográfica que consiste en crear una composición de elementos dispuestos de forma ordenada y fotografiados desde un ángulo cenital. Y terminando la parte teórica, que es un poco rollo, vamos al tema. 

Hoy he salido a pasear por la mañana y me he ido encontrando por el camino, pequeñas hojas otoñales. Es cómo si el viento me hubiera dejado un manto dorado, para que eligiera qué tesorito llevarme a casa, porque últimamente, en mis caminatas, siempre encuentro una hoja que me llame la atención. Cuando he llegado a casa, he visto todo lo que me había traído y he decidido probar a hacer un knolling, bueno, la verdad es que las he puesto así y cuando he hecho la foto, he caído en lo que era.

Me encanta ver todas las hojitas dispuestas de esa forma ordenada, creando un marco otoñal perfecto por su tamaño y sus colores. 

Ahora esas hojitas están a resguardo en su lugar correspondiente, pero también están presentes en esta foto tan bonita.

lunes, 5 de abril de 2021

Almendro en flor

Madre mia, la de tiempo que ha pasado que no escribía en este rincón, y la de cosas que han pasado en mi vida desde entonces, incluída esta pandemia que nos afecta a todos.

Por lo pronto diré que mi vida dio un giro en enero del 2020. Y poco después llegó la pandemia. En marzo tuve que estar confinada en casa, en mi cuarto, 36 días. Había pillado el covid trabajando (soy sanitaria).  En esos 36 días tuve tiempo de pensar, de reencontrarme, de sentir, de estar conmigo misma, y de saber lo que quería y lo que no en mi vida. Volví a trabajar y en agosto me lancé a la aventura y me fui a Lisboa, sola. Era algo que necesitaba hacer. En cuánto tenga tiempo os pondré fotos.

Y cómo de fotos trata este rincón, me dejo de rollos, y os cuento que este año estoy disfrutando de Primavera a tope. Fui con mi amiga Bea, a encontrarla, y ¡vamos que si la encontramos!. En todo su esplendor. Fotografiamos cerezos y almendros, mis árboles favoritos.







martes, 20 de agosto de 2019

Fotografiar gotas de agua

Siempre he fotografiado las típicas gotitas de agua que se quedan tras la lluvia en las hojas. Pero hoy estaba en casa, y después de estudiar un rato, he visto el flash (al pobre lo he tenido muy abandonado), el macro y el trípode, y he dicho ¿por qué no? 
He preparado todo, he configurado el flash y me he dispuesto a "intentar" fotografiar una gota cayendo en agua. Digo intentar porque es algo complicadillo sacar una gota justo cuando cae, toda rendondita. Pero creo que lo he conseguido.
Aquí os dejo tres imágenes completamente distintas. 

La primera es la gota redondita.


Esta segunda es justo al entrar en el agua.


Y esta tercera, justo cuando ha rebotado.


Tres tomas distintas, tres gotas distintas. Yo tengo mi favorita.
Y a vosotros, ¿cuál os gusta más?

domingo, 19 de mayo de 2019

Espigas

Hace unos días buscando en el disco duro externo, di con unas fotos que, tras hacerlas hace un tiempo, las deseché. No sé por qué no me convencieron en su día, quizá por los ánimos, quizá porque no era el momento, la cuestión es que nada más verlas, me encantaron y aquí están.








Me encanta la sencillez de cada una de ellas, la delicadeza, y el blanco y negro creo que potencian aún más su belleza.

Todos somos como espigas mecidas por el viento. Parecemos débiles, pero somos más fuertes de lo que creemos.

sábado, 2 de febrero de 2019

Una joya del analógico

Cuando tuve la clase del analógico en Spectrum Sotos, supe que algún día me haría con una cámara analógica. Y os preguntaréis por qué en la época en la que estamos, cuando todo el mundo usa réflex, yo no me lanzo a por una full frame en vez de por una de hace más de 30 años. Pues la respuesta es sencilla...me enamoré del analógico y me apetece sentir de nuevo, lo que sentí cuando cogí por vez primera una canon analógica en clase, o cuando vi por primera vez cómo se revelaban mis fotos. Es algo mágico.
Eso no quiere decir que me vaya a dedicar única y exclusivamente a ella. Sigo teniendo mi Canon, sigo haciendo fotos con ella, y no voy a dejar de usarla nunca. De hecho las full frame me llaman cada día más.
Pero si puedo tener la oportunidad de gastar carretes haciendo fotos especiales, si puedo tener la oportunidad de ver el romanticismo del analógico...lo haré.
Así que aquí os presento el nuevo miembro fotil de la familia. Una Nikon FM2, la cuál ya ha capturado las primeras imágenes y estoy deseando revelar el carrete para ver lo que sale.


lunes, 21 de enero de 2019

Analógico

Cuando sales de prácticas con Spectrum Sotos, tu profesora y tus compis de curso a hacer fotos chulas, sosteniendo por primera vez una cámara analógica en las manos, cogiéndola como si fuera algo frágil, buscando ese algo que te haga sentir para poder fotografiarlo. Cuando intentas meter el negativo en el cuarto oscuro a "oscuras", y casi te quedas medio cegata. Cuando sales oliendo a revelador. Cuando te haces una foto con tus compis, lavando los negativos, porque sí, aunque parezcamos el camarote de los hermanos Marx. Cuando ves con tus propios ojos cómo lo que has visto aparece en el papel. Cuando sientes al ver algo tan bonito. Cuando sencillamente te EMOCIONAS. Es cuando verdaderamente sientes en tu piel y en tus venas que eres FOTÓGRAFA. Y eso, señores...no tiene precio.

















No me diréis que el analógico no tiene un aire de nostalgia y de romanticismo.

domingo, 30 de diciembre de 2018

Un año que acaba

Otro año más se acaba, y la verdad es que si miro hacia atrás, no ha sido tan malo.
Empecé currando en un sitio especial, dónde ya había trabajado, e hice mucha amistad con mis "cardíacas" y también con mis chicas de pediatría. Llevo trabajando más de un año sin parar, sin que me duela nada, sin temor a no poder hacerlo. Porque además he podido demostrarme que sí, que puedo, ya que he vuelto a trabajar en planta. Allá donde he estado, todos han quedado contentos conmigo, y eso es de agradecer.
Realicé una oposición y vi como mi plaza pasaba por delante de mis narices sin yo poder hacer nada, pero la siguiente es mía.

Vi a mi Sagui después de varios años, y estoy deseando verla de nuevo.

Sobretodo, este año me di una oportunidad...me lancé de cabeza a hacer algo que me apasiona. Me apunté a un curso de fotografía a lo grande, y no uno cualquiera o en un sitio cualquiera, sino en la escuela Spectrum Sotos, que es una de las mejores, y lo avala los más de 40 años que lleva abierta, formando a grandes fotógrafos.

He tenido la suerte de conocer al gran Pedro Avellaned, y de tener y seguir teniendo los mejores profesores de fotografía. Al igual que conocer a personas con mis mismos gustos e inquietudes. Ha entrado gente en mi vida, que se quedará para siempre.
Además sin pensar en que podría conseguirlo, gané la Beca a mejor trabajo de curso medio y pude exponer mis fotos junto al resto de ganadores. Algo en lo que jamás pensé que llegaría a hacer.
He revelado mi primera foto en analógico. Y casi he llorado al ver cómo de la nada, salía aquello que había visto con mi retina.
Me he puesto delante de la cámara, y he sacado mis miedos, mis temores, mis complejos y me he quedado con lo mejor de mí misma.




Este año he sentido, me he emocionado, he seguido siendo yo misma, con mis alegrías y mis tristezas. Soy una mujer con carácter pero también dulce. Disfruto de los míos, con los míos, con mis amigos y con aquellas personas que me aportan mucho en esta vida. Sigo llorando al ver un atardecer, suspiro al leer un libro con buen final. Me quedo embobada viendo llover a través de la ventana mientras mis manos se calientan con una taza de té. Me encanta ver cómo se para el tiempo a través de la lente de mi cámara. Río cada vez que Zape hace alguna trastadilla sin importancia.
He acabado el año viajando con mi hermana y un amigo, como llevamos haciendo desde el año pasado.

Hoy puedo decir que no ha sido un año tan malo. Que me quedo con todo lo bueno, que ha sido muchísimo. Y que sólo le pido al 2019, que sea igual que este. 

Deseo que terminéis el año con alegría y empecéis el nuevo con felicidad. ¡FELIZ 2019!

sábado, 15 de diciembre de 2018

El autorretrato. Complejos

Para mí, el autorretrato siempre ha sido una forma de descubrirse a uno mismo. Es el viaje al interior de cada uno y por tanto es lo que más me cuesta en fotografía.
El martes tuvimos la clase práctica en Spectrum y fui con varias ideas en la cabeza, exactamente con 3, y de cada una hice una foto. Pero una de ellas me costó muchísimo, no la idea, sino el hecho de hacérmela. Me costó porque en ella muestro algo que me ha costado mucho sufrimiento...mis complejos. 


Quería tapar en la foto las cosas de mi cuerpo que me gustan, que son los ojos y la boca, y mostrar todo lo demás.
Estoy muy contenta porque he conseguido dejar una gran parte de mí plasmada en ella, he conseguido quitarme un peso de encima.
Quién sabe si con eso, consigo colocarme más delante de la cámara.

jueves, 15 de noviembre de 2018

El modo HDR

He comenzado el curso superior en Spectrum Sotos, y lo poco que llevamos ya me tiene encantada, aunque tengo que decir que hay poco que no me guste del arte de la fotografía. Una de esas cosas es el modo HDR. 
Llevo viendo en redes sociales que últimamente es algo que la gente usa para sus fotos, sobretodo algunos fotógrafos de paisajes, y hacen que sus fotos sean espectaculares, pero a la vez, parecen sacadas de una realidad ficticia. No sé si son sus contrastes, sus colores, pero no me siento identificada con ello. Siempre he preferido lo natural, la sencillez, lo que verdaderamente ve nuestro ojo o nuestra alma. Siempre he querido mostrar aquello que yo he sentido. Me da la sensación de que si retoco demasiado las fotos, o en este caso, si hago HDR, pierden su esencia.
En clase nos ha tocado ese tema, y hemos hecho las prácticas de rigor. No me lo curré mucho, porque entre el trabajo y la lluvia no he tenido mucho tiempo para escaparme a hacer fotos, pero lo que hice fue suficiente para ver que no es lo mío. Me fui a la Aljafería que me pilla cerca de casa. No quedan fotos tan artificiales como las que se ven por ahí, pero creo que se les ha ido la parte de mí que intento plasmar en cada una de las fotografías que hago.
Me ha ido genial dar esta clase y hacer las prácticas, porque así voy descartando lo que no me gusta del arte de fotografiar, y me voy quedando con lo que me apasiona.




domingo, 28 de octubre de 2018

Halloween

No soy de disfrazarme para Halloween, es algo que no me llama. Pero debido a que me pedí unos flash de estudio, me llegaron hace unos días y quise probarlos, decidí vestirme de algo que me hacía gracia...de monja.

Preparé todo y aquí están los resultados.




martes, 18 de septiembre de 2018

Metamorfosis

Como ya sabéis los que me conocéis la fotografía es mi pasión, y desde hace unos meses me estoy dedicando a continuar mi aprendizaje en la escuela Spectrum, la cuál lleva 40 años enseñando a mirar, enseñando a capturar el tiempo, el alma de la gente con la fotografía. 
Tras acabar el curso medio, presenté mi trabajo "Metamorfosis", y tuve la gran suerte de ser la premiada con la beca. Eso además conllevaba que pudiera exponer junto a otros compañeros ganadores de becas y accésits mi proyecto. Y el día 13 de Septiembre fue la inauguración de la exposición "MIRADAS", que se puede visitar hasta el día 24, en la escuela Spectrum, y dónde podréis ver mi trabajo.

De todas formas como el día 13 no pude estar ni pude contar por qué elegí este tema, lo hago ahora.

METAMORFOSIS comenzó hace un año, cuando yo estaba de baja médica por una operación de espalda, que me tuvo casi sin poder salir de casa y mucho menos sin poder salir con la cámara. Una persona que ama la fotografía se siente vacía si no puede hacer lo que le gusta, así que yo, decidí que ya que no podía salir a buscarla, la fotografía vendría a mí. Y lo hizo en forma de bodegones, gracias a un 52 semanas que hice junto a otras personas. Uno de esos días que estás genial, que ves que después de la operación todo va bien, quise hacer una foto diferente, cogí cuatro folios, los doblé, y salió esto.



Cuando la vi, supe qué había querido plasmar en ella. Quería plasmar la salida del pozo, la llegada de lo bueno, que todo lo malo ya había pasado, y que era hora de mirar hacia delante, hacia lo blanco. Que de lo negro había pasado a lo blanco. Que ya estaba bien del todo. Fue mi salida de una época que lo había pasado muy mal.
Me apunté en Spectrum, me apunté a un curso en el que aprendí muchísimo, sobretodo a manejar la luz artificial y cuando nos comentaron que teníamos que presentar el proyecto para beca, no lo dudé. Supe que quería seguir con Metamorfosis.
Para hacer las cuatro fotos usé flash cobra, el que más miedo me daba al empezar el curso. Y os puedo decir que ya casi no le tengo nada de miedo.
Luego quise seguir con el tema del papel, porque fue uno de los mayores inventos. Porque en él se escriben historias que luego leemos en forma de libros, podemos dibujar y dar color a pensamientos en forma de cuadros, y vemos como en el papel sale aquello que hemos capturado con la vista y con la lente de nuestra cámara. Además podemos crear figuras y formas como en el caso de mi proyecto. El papel se metamorfosea en lo que queramos.
No mentiré si digo que me encanta lo abstracto, lo minimalista, y el blanco/negro. Creo que es algo que le da fuerza a determinadas fotos.

Metamorfosis es un proyecto personal. Me he dado cuenta de que yo también he cambiado, como lo hace el papel. Y lo he hecho positivamente. He aprendido que con tesón se consiguen cosas que creían inalcanzables, y que la fotografía sigue siendo mi pasión, y lo será siempre. Por eso, este proyecto no acaba con estas cuatro fotos que os enseño ahora, sino que va a haber más seguro. Y espero poder enseñároslas algún día.








De momento podéis ir a verlas a Spectrum Sotos, y disfrutar de ellas y de las del resto de compañeros que son todas maravillosas.

Para terminar, darles las gracias al jurado, que fue el que eligió mi proyecto como ganador de beca, pero sobretodo a la escuela en sí, al director, a Marga y a profesores, por hacer que hoy sea mejor "fotógrafa" y mejor persona.

jueves, 10 de mayo de 2018

Fotografía de producto

Uno de los temas que más me gusta fotografiar, a parte de naturaleza y atardeceres, son bodegones o cómo se les llama ahora, "still life". 
Cuando estaba en casa con la baja, sin poder salir demasiado a la calle, me las apañé para no dejar la fotografía de lado y me dediqué a hacer fotos a aquello que había en casa. Fue algo muy gratificante, porque aprendí como debía de dar la luz natural para que salieran mejor las fotos, pero sobretodo, tuve que dedicar tiempo a pensar en cómo hacer la foto, en cómo poner los productos y en cómo hacer que llamara la atención. En algunas lo conseguí y en otras no, pero al menos lo intenté.

Gracias al curso medio de la escuela Spectrum Sotos, estoy aprendiendo a hacer fotografía de producto, pero con flash. Los que me conocen, saben el "miedo" que le tenía al flash. Y os puedo asegurar que aún le sigo teniendo respeto. Quizá porque me habían dicho que era mejor la luz natural, que la luz del flash aplanaba los objetos, y sobretodo porque nunca lo había tocado (y eso que tenía uno, regalo de mis amigas), no me veía usándolo.

Pues bien, después de haber hecho fotografía de retrato y estos días fotografía de producto, puedo decir que estoy encantada con él. Si antes me gustaban los bodegones, ahora me apasionan, y sé que seguiré haciéndolos.

Ayer aprendí cómo dar frescor a las latas, cómo conseguir que a la gente que vea la foto le entre sed.






Pero lo mejor de todo fue que me lo pasé en grande haciendo estas fotos con mis compis. 

domingo, 18 de febrero de 2018

Levitando con Tolkien

Hace días estaba tan tranquila en casa, pensando en mis cosas, que me vino una idea...quería hacer una fotografía, y no una cualquiera, no, sino una que me habían enseñado a hacer en un curso, hace tiempo, pero que por unas cosas u otras nunca la había puesto en práctica. Supe que ese era el día para probar a hacerla y me puse a ello.


Montar el trípode, ajustar la cámara, prepararte sin caerte de cabeza, hacer equilibrios y tal, es muy divertido, tanto que cada vez que se disparaba la foto, me tronchaba de la risa, y conmigo, las personas que tenía alrededor. Tras varias pruebas de postura y fotos realizadas, lo pasé todo al ordenador y me peleé con photoshop. Seguimos sin entendernos demasiado. Sé que hay muchos errores, pero también sé que conseguiremos llevarnos bien.
Eso sí, la foto, para ser la primera, me ENCANTA. Y no podía estar rodeada de mejores libros, que los de mi querido Tolkien.

domingo, 4 de febrero de 2018

Belchite Viejo

Justo antes de acabar el año, mi hermana me preguntó si quería ir con ella, un amigo suyo y su novio a visitar Belchite Viejo. No dudé en apuntarme. La visita era guiada y a la hora que cogimos (las 8 de la tarde), contaban las leyendas de ese lugar que sufrió tanto.
Llegó el día y tras visitar Belchite Nuevo, con sus villancicos sonando a todo volumen por cada una de sus calles (eso nos pasa por decir que queríamos escuchar villancicos ^_^) y tomarnos un café para entrar en calor, nos dirigimos a la entrada de Belchite Viejo.
Allí tuve la suerte de coincidir con otra fotógrafa, que como yo, iba cargada con trípode. Tras hablar un rato de nuestra pasión por la fotografía, y tras preguntar si podíamos entrar con el trípode a hacer fotos, traspasamos la puerta con ilusión, porque podríamos hacer buenas fotos.

Mientras los demás se iban con la guía y escuchaban las leyendas (nosotras también lo podíamos oír porque estaba todo a oscuras y en completo silencio), nos dedicamos a colocar todo para hacer las primeras fotos.


Después de una, llegaba otro lugar increíble, rodeado de misterio, y no podíamos dejar de fotografiarlos. Todos ellos con las estrellas que surcaban el cielo, y con una luna que hacía que las fotos aún salieran más bonitas.






Cada uno de los sitios que íbamos viendo, daban respeto, tenían memoria, y sentimiento. Contaban todo por lo que habían pasado los habitantes de Belchite, todo lo que sufrieron.


En este lugar en concreto, se me puso la piel de gallina, quizá por lo que nos contaron, o quizá por todo lo que se notaba en el ambiente.



Lo último que fotografiamos antes de salir fue el Convento de San Agustín, que está en tan mal estado, que no pudimos entrar, por peligro de derrumbamiento.



Os puedo asegurar que todos los que entramos a visitar el pueblo, salimos con el corazón encogido. 

No sé como será verlo de día, pero de noche da mucho respeto. 

Ese día tuve sentimientos encontrados. Estaba feliz porque por fin había hecho fotos de starlight, y para ser las primeras no estaban nada mal, pero por otra parte estaba entristecida por lo que nos habían contado.

Lo mejor sin ninguna duda fue la gran compañía de mi sister, Axel y Álvaro. 

martes, 25 de abril de 2017

17/52. Efecto seda

Desde hacía tiempo quería probar a hacer esta técnica, pero nunca lo había intentado, bien porque no sabía exactamente cómo hacerla, porque no me venía una idea a la mente o las dos cosas.
Cuando vi que en el reto 52 Still Life, el tema de esta semana era "Movimiento", pensé primero en congelar el azúcar cayendo sobre una fresa, e hice la foto, pero luego pensé que era algo que ya había hecho en su día y que quería hacer algo nuevo y me vino a la idea el "efecto seda". 
Gracias a los cursos que he estado realizando y con todos los conceptos claros, ya sabía como hacerla, lo único que me hacía falta era pensar en el lugar idóneo, con la luz idónea. Cuando ya lo tuve, preparé todo: el fondo, la ayudante (mi señora madre sostenía la cuchara mientras echaba el azúcar), el trípode y la cámara con todos los parámetros listos. Sólo me faltaba que empezara a caer el azúcar para hacer la foto. Y este es el resultado.



Fue verlo bien en el ordenador y estar contentísima con el resultado. Por fin he hecho mi primer "efecto seda". Me ha gustado tanto, que probaré a hacerlo con otros elementos, como el agua.
Design: WS
Crisálida © 2016.
Volver arriba