Cuando empezó este año, me dije que tenía que buscar mi estrella. Dejar atrás los miedos, los "peros", lanzarme y hacer cosas, sobretodo aquellas que por una cosa u otra, siempre dejaba atrás, y otras que eran importantes, pero nunca les daba la importancia que tenían.
Y eso he hecho.
He estudiado como la que más, dándolo todo para poder tener una plaza. Hice el examen y la verdad, es que salí bastante contenta. Ahora hay que esperar a ver qué pasa.
En enero me apunté a un curso presencial en una escuela de fotografía. Estoy aprendiendo muchas cosas, sobretodo con respecto al tema luz y estoy disfrutando muchísimo.
Llevo trabajando casi 5 meses seguidos, sin dolores, sin miedos a no poder hacerlo. Lo mejor de todo es que casi siempre estoy en el mismo sitio, con compañeras geniales (hay un orco, por ahí, pero qué se le va a hacer), y me encanta lo que hago.
Con todo eso, y más cosas, me he dado cuenta de que la tristeza y melancolía se están quedando en un segundo plano. Casi se podría decir que ya no están en mi vida.
Poco a poco voy consiguiendo lo que me propongo. Mi estrella me guía allá en el cielo. Lo ha hecho siempre y lo seguirá haciendo.
No hay comentarios
Publicar un comentario